martes, 11 de septiembre de 2012

Maná

All shall be well, and all shall be well, and all manner of thing shall be well.
(Dama Juliana de Norwich)

Desde que me sacaste del parque de atracciones del psíquico, todo sabe a nada.
A nada.
Hasta que recuerdo las protestas de los díscolos israelíes y su desdén por el maná con el que los alimentabas en el desierto. Ellos querían... carne y cebolla.
Como yo, a veces.
Puede que sólo me mantengan la curiosidad y la tozudez, esos dos dones-defectos (según se mire), y el tan traído y llevado amor fati. Mas una  fe ciega y oscura, una desnuda certeza de que, como decía la Dama Juliana, "todo estará bien, y todo estará bien, y toda clase de cosas estarán bien".
En cualquier caso, me quedo con el maná.
Hasta que aprenda a apreciarlo.
Y...gracias. Por todo.
Lo digo en serio.